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miércoles, 31 de octubre de 2012

Finca Belén de Humanao y una noche salteña en el Peron-Peron




De mi paso por el Salón de Vinos de Altura 2012, fueron pocas las sorpresas que me llevé, en realidad conocía casi todos los vinos que estaban en los stands, y mas allá de la buena calidad general de los vinos de Salta, aquel día la sorpresa fue reencontrarme con los vinos de FINCA BELEN DE HUMANAO, que ya conocía, pero que virtualmente habían desaparecido sus vinos de Buenos Aires por unos cuantos años.
Días mas tarde, y gracias a Gonzalo Alderete Pagés (cocinero salteño y amigo) y María Emilia Saravia (representante comercial de Humanao), organizamos una cena-degustación en el Resto PERON-PERON del barrio de Palermo.
Vista panorámica de la bodega
La bodega Humanao se encuentra a 2260 metros de altura en el valle de Amaicha, departamento de Molinos, Salta. Dirigida por Matías Raúl Franzini y con la enología de Luis Asmet, cuenta con piletines y piletas de cemento, una vieja moledora y algunas barricas nuevas de roble francés. Si mal no recuerdo de sus 28 hectáreas embotellan unos 130.000 litros al año, en 3 segmentos de precio, Amaicha, Humanao y Humanao Reserva.
La idea era juntarnos en el restaurante de Gonzalo y hacer una noche bien salteña en el corazón de Palermo, probar los Humanao y ver como maridaban con los platos de éste cocinero que nunca se aleja de los sabores de su tierra natal.
La experiencia….
Arrancamos con el Humano Chardonnay 2011 y el Humano Sauvignon Blanc 2011, ambos muy expresivos y con buena tipicidad varietal, frescos y ágiles en boca, con un hilo conductor interesante, que son sus aspectos vegetales y minerales. Para estos vinos el cocinero preparó unas empanadas fritas de queso y morrón que se llevaron de maravilla con los blancos.
Los 7 vinos de la noche
Se vino el tiempo del Humanao Malbec 2007 y 2008, ambos muy parecidos, el 08 estaba mas vivaz y corpulento, de esos malbecs salteños donde la acidez es un poco mas corta pero con buena estructura, que va mezclando la fruta roja y negra con los aspectos especiados que son un sello característico de la zona, ágil y franco, intenso pero equilibrado, logra un final de boca placentero y largo. Con los malbecs salieron las empanadas de carne y osobuco, por supuesto fritas, crocantes por fuera y jugosas por dentro, las especias y condimentos pedían un tinto de éstas características, gran maridaje para las empanadas de carne.
Seguimos con el Humanao Cabernet Sauvignon 2008, que fue uno de los vinos que mas me impactó de la noche, en nariz es potente e intenso, destacan sus aromas especiados y vegetales, la fruta no es protagonista y la madera parece inexistente, un Cabernet macho, 100% salteño, pero amable, en boca es intenso y repite en el retrogusto sus descriptores aromáticos, de muy buena estructura y final de boca largo y placentero. Luego vino el Cabernet-Malbec 2007, muy parecido al CS, pero con ciertos dejos frutales que lo suavizan y lo hacen mas amigable con el paladar porteño, en boca logra muy buena fluidez y equilibrio, el malbec le aporta mas dulzura a los taninos y apenas algo mas alta la acidez. En este caso comimos pastel de papa a la salteña en vasija de barro, que por cierto se llevó de maravilla con los vinos.
Para el final dejamos el Humanao Reserva 2008, es el vino top de la bodega y sale de las mejores uvas de los viñedos mas añosos de la finca, declara 70% Malbec y 30% Cabernet Sauvignon. Es complejo y elegante, con fruta madura roja y negra, muy especiado y suaves aromas de tabaco y cuero. En boca es amplio e intenso, jugoso pero firme al mismo tiempo, cada copa invita a seguir bebiendo una mas, final larguísimo donde toda su complejidad se hace realidad en el gusto y el olfato. El plato principal fue osobuco braseado con polenta, un clásico de Gonzalo que no me canso de pedir cada vez que voy a su restaurante, fue a mi entender el maridaje de la noche, amor a primera vista, puro disfrute.
Como definiría los vinos de HUMANAO?
Son vinos extremos, porque vienen de un lugar extremo, su geografía y su clima se refleja en ellos con gracia y enjundia, no hay muchos vinos en el mercado como éstos, sin lugar a dudas son diferentes y seguramente tendrán sus adeptos y sus detractores. Vinos con un ADN salteño 100%, hechos mirando hacia adentro, tratando de reflejar su terruño con autenticidad y sin golpes bajos, como serían el abuso de la madera nueva y la extrema maduración de la fruta. Ojalá pronto los veamos en todas las vinotecas y restaurantes, tienen una gran calidad a un precio accesible.
Maria Emilia Saravia (representante comercial)

Agradecimientos:
A Gonzalo, por ceder tan gentilmente su lugar y por la exquisita comida que sirve cada día en el PERON-PERON.
A María Emilia Saravia, por presentarnos de manera tan íntima los grandes vinos que representa y por la buena onda de compartir la mesa con nosotros.
Por el vino, por su gente, por su gastronomía, por su belleza natural, que viva Salta!!!